martes, 22 de abril de 2014

Tipos de Elefantes




Texto: Héctor Rodríguez de la O. 
Fotografías: Julio Langarica

¿Por qué tipos de elefantes? Sería muy fácil decir que es por el tamaño de los accidentes en forma de ser humano o elefante que aparecen en las imágenes. Y tal vez sea así, al menos a un nivel si no elemental, complaciente. Busquemos no complacernos ni complacer, busquemos buscar, buscando. Viendo.





La del elefante en medio de la gente

No hay nada que se parezca más
ni que sea tan diferente, también
al hombre
como un elefante
(con excepción del hombre elefante)





La del elefante no-camello llamado Fante
 
John L. Fante era un infante regente de la marina mercante.
Un día de la nada de volvió parecido a un sicofante narcotraficante y,
triunfante y elegante y rozagante
se nos puso enfrente como una interrogante bastante cargante:
todo eso era, y no era,
John L. Fante.




La del elefante objeto de objeciones
 
–¿Qué se siente ser un elefante?
Se siente gigante.
–¿Y qué se siente ser la máscara de un elefante?
Se siente arrogante.
–¿Y qué se siente ser el sombrero de un elefante?
No sé, rozagante.
–¿Y qué se siente?
Pues que se siente.




La del elefante cinéfilo mercante

Ante la memoria creepytante
chisporroteada y efímera
un elefante
cayo en la cuenta
de que ya no frecuenta
desde que tenía cincuenta
ningún recuerdo
y se pregunta
con los pelos de punta
si valdrá o no la pena
el tiempo quemado y la sola superficie.


 
 La del escenario con elefhambre

Clases de elefante se nos ponen delante
no sé, nomás no digas que no sé, que no, que antes.
Cosas de elefantes y elefantes sedantes
abundantes en la vida, y votantes
importantes, errantes.
Quevedo y Cervantes
¿Alighiero Dante?
Nada en los estantes.
Cosas de elefantes